Ya hemos expuesto en estos espacios que hay muchas más maneras de motivar a las personas que solo con remuneración económica. Los líderes se pueden valer de diferentes incentivos para impulsar a sus equipos, sin importar si estos trabajan en las instalaciones de la empresa, vía remota o bajo un esquema híbrido.

Cada vez es más habitual ver que las organizaciones, sus líderes y sus áreas de Recursos Humanos llevan a cabo cambios en las estrategias para impactar de manera positiva a los colaboradores, con esquemas personalizados que procuran su bienestar y mantenerse cerca de ellos.

Hoy las personas tienen necesidades e intereses distintos a los que mostraban hace unos años. Se ha identificado que un gran porcentaje pondera el equilibrio entre el ámbito personal y laboral, el sentir que su trabajo es parte de su proyecto de vida, que su labor aporta y es significativa, que es valorado su desempeño, que aprende y se desarrolla, entre otras prioridades antes que el dinero.

Para conocer con mayor detalle lo que su gente siente, piensa, requiere y preocupa, lo mejor es que las organizaciones estén atentas a las pulsaciones internas, el área de Recursos Humanos puede realizar encuestas internas y los líderes tener comunicación más estrecha con sus equipos.

Aunque determinar cuáles son las mejores estrategias para incentivar e impulsar a los colaboradores depende del perfil y cultura de cada organización, estos son algunas acciones que pueden ser una referencia o punto de partida:

  • Flexibilidad laboral, desde adaptación de horarios hasta home office.
  • Enfoque en el bienestar de los colaboradores y sus familias.
  • Comunicación sólida, amplia y abierta con el líder.
  • Inversión en desarrollo profesional y personal de su gente.
  • Equilibrio en cargas de trabajo, retroalimentación y capacitación en el equipo.
  • Visibilizar el éxito y las contribuciones personales y de equipo
  • Pequeñas recompensas personalizadas de acuerdo con objetivos